El tomate de árbol es un frutal originario de los Andes de América del Sur, norte de Argentina, Perú, etc., que produce un fruto similar al tomate, dicen que el sabor es una mezcla entre tomate y maracuyá. La piel no se come, o al menos es lo que se aconseja.

El árbol puede llegar a medir 4 metros de altura y vivir más de 12 años, según el clima. No resiste vientos (por lo cual en regiones ventosas hay que entutorarlo), y resiste heladas de hasta -2º C. Si es dañado levemente por una helada, vuelve a rebrotar. En climas sin heladas produce frutos todo el año.

Nuestro ejemplar tiene casi 2 años de vida.

Es interesante saber que en Argentina se creía extinto, que ya no había más ejemplares… y de hecho puede ser que fuera así. Es muy difícil en nuestro país que un vivero posea tomate de árbol. Durante el siglo XIX fueron conocidos en Nueva Zelanda, Australia y otros países donde actualmente se los cultiva y se los comercializa, quizá volvieron a introducirse en Argentina desde aquellas regiones, dado que las variedades que existían aquí hace dos siglos atrás no eran de frutos rojos, sino amarillos. Se dice que la variedad de frutos rojos, actualmente la más conocida en el mundo, fue creada por hibridación en otro continente a mediados del siglo XX.

3 thoughts on “tomate de árbol, tamarillo (Solanum betaceum)”

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